Fue en 2003 cuando entró en funciones la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero (FND) una institución destinada a brindar créditos al sector primario y a todas aquellas actividades productivas que se localizaron en zonas rurales; sin embargo, a finales del año pasado dejó de otorgar créditos lo que llevó a que el pasado 29 de abril de 2023 la Cámara de Senadores aprobara el proyecto de decreto de su extinción. Según el dictamen, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en su carácter de coordinadora de sector, a través de la Unidad de Banca Desarrollo, será la responsable del proceso de extinción y liquidación del organismo. Esta dependencia, dentro de un plazo de 180 días naturales, contados a partir de la entrada en vigor de la reforma, publicará las bases de liquidación, en la atención a lo dispuesto en la normativa aplicable. El proceso de liquidación estará a cargo del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, quien fungirá como liquidador único del gobierno federal, conforme a las disposiciones legales aplicables, para lo cual tendrá las más amplias facultades para actos de administración, dominio, pleitos y cobranzas. Dentro de las principales razones por la cual desaparece se justifica básicamente por su incremento de la cartera vencida. Dentro de las principales posturas tenemos por ejemplo al Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, señalando que los argumentos presentados son muy endebles debido a que el crédito al sector agropecuario en 2017 era de 9.9 por ciento Y para 2019 cayó 8.4%. La falta de recuperación de cartera inició con la nueva administración que no contaba con el personal suficiente para llevar a cabo las labores de supervisión debido a las políticas de austericidio. Así mismo, señalan que el cierre de la FND dejará un hueco inmenso ya que la banca comercial, sofomes, cajas populares, uniones de crédito se quedan sin fuente de fondeo para profundizar el crédito en el sector rural. Y los productores que tenían crédito con FND ahora se pueden encontrar a merced de prestamistas con tasas de interés más caras. Por último se advierte que la salida de la FND del mercado generará menos competencia y llevará encarecer el costo del dinero para el único sector que ha crecido durante este sexenio. Fuente: El Economista