La economía de México ha tenido un buen desempeño al inicio de año impulsada principalmente por el sector de servicios, lo que ha llevado a varias instituciones a ajustar al alza sus expectativas para el Producto Interno Bruto (PIB) de todo el año. Sin embargo, los expertos consideran una desaceleración en los próximos meses, principalmente por el efecto de las altas tasas de interés y el enfriamiento en Estados Unidos. Durante marzo, el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) se perfila a un crecimiento de 3.8 por ciento, que si bien es menor al 4.2 por ciento que se reportó en febrero, muestra que ha sido resiliente a pesar de un entorno más incierto, según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Por sector de actividad económica, el secundario habría crecido 3.0 por ciento anual en marzo, desde el 3.5 por ciento del mes previo; mientras que las actividades terciarias tuvieron mayor solidez y su ritmo de crecimiento de 4.2 por ciento anual en el tercer mes del año. Con esta cifra, el PIB de México para el primer trimestre apunta al crecimiento de 3.9 por ciento anual, con un avance de 3.0 por ciento en la industria y de 4.3 por ciento en los servicios. El IOAE revela que los servicios mantuvieron su ritmo de crecimiento de 4.2 por ciento anual en marzo, mientras que las actividades secundarias se desaceleraron a 3.0 por ciento, desde el 3.5 por ciento de febrero. Pese al buen desempeño en marzo, en su comparación mensual, la actividad mostró un avance de apenas 0.1 por ciento, el más bajo desde que se contrajo 0.4 por ciento en noviembre del año pasado, lo que podría interpretarse como la antesala de un mayor enfriamiento en los siguientes meses. Fuente: El Financiero