El paquete contra la inflación y carestía que presentó el gobierno federal tendrá un impacto muy acotado en el alza de precios y sí uno grande en las finanzas públicas del país.
Debido a que la mayoría de los efectos inflacionarios provienen de choques externos, analistas consideraron que el éxito de este plan no se verá en el corto plazo y dependerá del comportamiento de precios a escala internacional.
El plan presentado contempla trabajar 4 medidas: la producción, distribución, comercio exterior y otras medidas para mantener el precio de alimentos.
La inflación que enfrentan las economías del mundo, México incluido, es causa principalmente por el conflicto entre Rusia y Ucrania, 2 países que abastecen a otras naciones de granos como el trigo y fertilizantes.
Esto ha causado que los países tengan que buscar alternativas de abastecimiento de alimentos.
El plan que busca aumentar la producción de alimentos en el país, aunque es bueno, tardará más de 6 meses en surtir efecto, que es el primer plazo que se ha puesto el gobierno como meta.
Los efectos que sí pueden verse en corto plazo son los estímulos al IEPS por combustibles, que ya se aplican desde hace varios meses.
Si este plan no funciona ya sea por la guerra entre Rusia y Ucrania o la pandemia de COVID-19 vuelve con más contagios, en particular en China, los precios seguirán aumentando y el Banco de México deberá continuar con su ciclo de alzas en las tasa.