Tras el inicio del conflicto entre Rusia y Ucrania, la repercusión que podría esperarse en la economía mexicana va desde el alza al precio del petróleo que beneficiaría a Pemex, sin embargo las finanzas públicas serían afectadas por los subsidios a las gasolinas.
De acuerdo a expertos, el tamaño de las economías de ambos países en conflicto no son lo suficientemente grandes en términos de comercio y flujos financieros como para que tengan una gran repercusión, por ello el impacto más fuerte sería un potencial contagio financiero.
En gran medida dependerá de que está situación no escale a más, donde pueden presentarse 3 grandes canales de afectaciones: el comercio, contagios financieros a la aversión al riesgo en portafolio global y el impacto en commodities.
Pemex se beneficia por el precio del gas que está en aumento al igual que es el caso del petróleo, siendo buen panorama para la exportación de crudo. Pero para las finanzas públicas por los subsidios a la gasolina serían malas noticias.
Respecto a los bancos centrales, se les complicaría el escenario, esto con los temas del incremento en las tasas de interés de referencia y las decisiones a tomar en los próximos meses.