La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió reducir la tasa de fondeo interbancaria en 25 puntos base, llevándola a 10.75%. Esta decisión, tomada por mayoría de 3 a 2, contó con los votos disidentes de la subgobernadora Irene Espinosa y el subgobernador Jonathan Heath. En el comunicado emitido tras el quinto anuncio monetario del año, Banxico argumentó que la trayectoria descendente de la inflación subyacente, la cual se prevé seguirá moderándose, justifica una postura monetaria menos restrictiva. Destacaron que, aunque el panorama inflacionario sigue requiriendo cautela, la evolución reciente sugiere que es adecuado reducir el grado de restricción monetaria. Este recorte marca la reanudación del ciclo de disminuciones de la tasa, que había sido pausado en mayo. El ciclo había comenzado el 21 de marzo, cuando la tasa fue recortada en un cuarto de punto, bajando del 11.25% al 11%. Es la primera vez que la tasa se ubica en 10.75% desde que Banxico adoptó la tasa como objetivo operacional en 2008. A pesar del recorte, Banxico elevó su expectativa de inflación para el último trimestre del año a un promedio de 4.4%, por encima del 4% proyectado en junio. En cuanto a la inflación subyacente, las previsiones se mantuvieron sin cambios, con una variación anual esperada del 3.9% para fin de año. Tras el anuncio, el peso mexicano experimentó un retroceso en sus ganancias, cotizando en 19.0108 unidades por dólar, una apreciación de 1.33%. Esto representó una leve pérdida en comparación con el avance previo al anuncio, cuando el peso se fortaleció hasta 18.9110 unidades por dólar. Fuente: El Economista