La estrategia económica de corto plazo de México busca blindar la economía y fortalecer la confianza de los mercados ante posibles choques externos, como las próximas elecciones en Estados Unidos, conflictos geopolíticos y altas tasas de interés, según afirmó el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O. Esta estrategia incluye asegurar un balance entre ingresos y gastos en los presupuestos y estabilizar el nivel de la deuda en relación con el Producto Interno Bruto (PIB). Durante su disertación "Balance y agregados macroeconómicos de México en esta administración 2019-2024" en el Palacio de la Autonomía de la UNAM, Ramírez de la O explicó que a mediano plazo se busca establecer un modelo propio de desarrollo compartido. Además, se pretende aprovechar oportunidades de inversión privada y extranjera para relocalizar plantas y empleos en México, con el objetivo de aumentar el bienestar. El secretario destacó que el balance fiscal de México, un pilar de su economía, ha ganado la confianza de los mercados, brindando estabilidad a mediano plazo, acceso a crédito y una deuda pública balanceada. Sin embargo, reconoció que el costo financiero del país ha aumentado, comenzando en 2021-2022 debido al incremento de la tasa de interés del Banco de México y al mayor volumen de financiamiento en el mercado. Ramírez de la O subrayó que la incertidumbre sobre el costo financiero es alta, influenciada tanto por la tasa de interés del Banco de México como por la tasa de la Reserva Federal de Estados Unidos. Esta combinación ha elevado el costo financiero y creado presión en la economía. El secretario también mencionó la importancia de analizar la futura trayectoria de las tasas de interés y la previsión de ingreso y gasto para medir el déficit necesario para financiar el mercado. Indicó que el costo financiero superior al 3% del PIB es alto y que es crucial mantener este costo bajo control para preservar el balance y la confianza de los mercados. En cuanto al desarrollo regional, Ramírez de la O señaló que la inversión pública y privada ha aumentado la productividad en regiones como el sureste, noreste y el Bajío. Recordó que después del 2000, muchas industrias mexicanas se trasladaron a China, dejando a varias regiones sin estas empresas. Ahora, México tiene la oportunidad de relocalizar estas industrias y debe aprovecharla. Finalmente, el secretario enfatizó que para mantener la estabilidad económica, es esencial preservar un balance entre ingresos y gastos y mantener el indicador deuda/PIB en un nivel saludable, comparado favorablemente con otros países emergentes y desarrollados. Fuente: El Financiero